El crecimiento de la actividad productiva registrada el año pasado (8.78%) no resultó ser una sorpresa para los principales representantes del empresariado peruano, sino más bien es la confirmación del gran momento económico por el que atraviesa el país.
El presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep), Ricardo Briceño, se mostró satisfecho con estos resultados, pues afirmó que es el reflejo de una política económica basada en la disciplina fiscal.
"La verdad es que estas cifras no son sorpresivas. Por el contrario, el país mostró un crecimiento muy sólido en los últimos años, superando inclusive coyunturas adversas como la crisis financiera internacional en 2009, razón por la cual estábamos seguros de que la recuperación el año pasado iba a ser significativa", comentó.
Horizonte
Briceño afirmó que el nuevo reto es que nuestra economía se mantenga en esa línea este año, especialmente complejo debido a las próximas elecciones generales.
"Esperamos que este proceso electoral se desarrolle con total normalidad como lo viene haciendo hasta ahora, pues ello aumenta la confianza en los inversionistas, quienes ven que en el Perú hay políticas firmes que van más allá de las preferencias electorales", aseveró.
Asimismo, el presidente de la Confiep manifestó su esperanza en que los fenómenos climáticos no se presenten con la intensidad mostrada en años anteriores.
"Vemos como el sector agropecuario tuvo un desempeño importante en la evolución del Producto Bruto Interno (PBI) de 2010 y esperemos que este año la situación no sea diferente", refirió.
Briceño exhortó a mantener la disciplina fiscal y a trabajar para lograr un crecimiento basado fundamentalmente en la producción y en la inversión.
Continuidad
Para el presidente de la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (Afin), Gonzalo Prialé, el desempeño del PBI en 2010 es el resultado de la continuidad de la política económica y del acierto del Gobierno, específicamente al lanzar un plan anticíclico cuando estalló la crisis financiera internacional.
"Afortunadamente, la economía no se frenó y el país recuperó su dinamismo. Es posible mantener estas tasas altas de crecimiento con una inflación muy baja debido a que un gran número de proyectos de infraestructura entraron en operación en los últimos años", comentó el líder gremial.
Prialé destacó el desempeño de sectores como la construcción y la manufactura. No obstante, sostuvo que un crecimiento a tasas tan altas podría ocasionar ciertos cuellos de botella.
"Lo importante es que en el Perú indicadores como la inflación y el déficit fiscal están perfectamente controlados, situándose inclusive muy por debajo de lo esperado. La suma de todos estos factores se traduce en resultados realmente impactantes en beneficio nuestro", comentó.
El presidente de Afin expresó su confianza en que el Perú se mantenga bajo este desarrollo.
Desarrollo social
El presidente de la Asociación de Exportadores (Adex), José Luis Silva, afirmó que resulta satisfactorio para todos que el Perú mantenga el liderato en el crecimiento económico en el ámbito latinoamericano.
"Lo importante ahora es saber mantener este desarrollo y hacer que toda la población sienta que se está beneficiando también. Por ello, esta evolución debe estar acompañada de desarrollo social para que se refleje en la economía de la gente que tiene menos recursos", comentó el ejecutivo.
Asimismo, Silva manifestó que muy pronto los peruanos tomaremos una decisión sobre quién tomará el rumbo de nuestro desarrollo para los próximos cinco años.
"Lo que debemos hacer es buscar dentro de las propuestas que esperemos se empiecen a discutir aquella que garantice el continuo crecimiento de nuestra economía y que todos los peruanos nos sintamos parte de este desarrollo", aseveró.
Exportaciones
1 El presidente de Adex aseguró que las exportaciones aumentaron en alrededor de 30% en 2010, debido a los mejores precios pagados por las exportaciones tradicionales y por una mayor producción en el caso de las no tradicionales.
2 En ese sentido, destacó el esfuerzo de los productores y exportadores para impulsar el sector, puesto que los precios internacionales de los productos no tradicionales cayeron en aproximadamente 22%.