Las monedas de América Latina se fortalecerían de manera generalizada esta semana, aunque factores locales, como un incierto resultado electoral en Perú y la intervención del banco central en Argentina, pondrían del lado opuesto a los tipos de cambio de estos dos países.
Brasil y México, los dos mayores mercados de la región, irían por un mayor avance. El real brasileño se apreciaría, apoyado en la perspectiva de los inversores de que el país aplicará medidas menos severas de lo esperado para controlar el ingreso de capitales.
"En el corto plazo, vamos a probar algunos niveles. Vamos a probar (el nivel de) 1,60 (reales por dólar)", dijo André Perfeito, economista de Gradual Investimentos.
"Pero el Gobierno no va a dejar (que el real) se fortalezca demasiado", consideró el especialista. La semana pasada el real se apreció casi un 3 por ciento, en su mayor alza en ese plazo en casi un año.
El peso mexicano, por su parte, seguiría operando en la zona de 11,75 a 11,95 por dólar, donde se ubican sus mejores niveles en casi dos años y medio.
"El riesgo al alza del dólar/peso lo veo más por el lado global y si no hay muchos datos se ve limitado (...) En mi escenario base, esperaría que el peso se mantenga por estos niveles", comentó Roberto Melzi, estratega para América Latina de Barclays Capital en Nueva York.
En contra de esta tendencia, el peso argentino seguirá presionado por la política de compra de dólares del Banco Central, que lo mantiene cerca de mínimos históricos.
El peso mayorista, que opera en torno a 4,0525/4,055 por dólar, acumuló en marzo una depreciación del 0,62 por ciento.
Por su parte, la moneda argentina en el renglón informal de cambios se ubica en la zona de 4,145/4,15 unidades.
"La tendencia estable (...) ha mutado a una tendencia estable y ligeramente alcista (del dólar frente al peso)", dijo la firma financiera Puente en Buenos Aires.
INCERTIDUMBRE ECLIPSA AL SOL
El sol peruano viviría jornadas de alta volatilidad en la semana previa a las elecciones presidenciales, en las que el candidato nacionalista Ollanta Humala, percibido como opuesto a los mercados, sigue encabezando las preferencias.
"El mercado no contará con encuestas públicas y se especulará mucho con los resultados (...), en estas coyunturas de alta incertidumbre política no se puede prever el comportamiento de una variable como el tipo de cambio", dijo Gonzalo Navarro, gerente de cambios del Banco Santander en Lima.
El viernes, el sol cerró sin cambios respecto a la víspera en 2,805/2,806 unidades por dólar.
Las monedas de Chile y Colombia se mantendrían dentro de la tendencia mayoritaria de ganancias, guiadas por los mercados externos. Sin embargo, el peso colombiano verá apoyo adicional en la expectativa de ingresos de dólares de inversión extranjera directa y la entrada gradual de recursos del Gobierno, dijeron analistas.
El peso colombiano cerró el viernes a 1.849 unidades por dólar, su nivel más alto desde el 21 de enero, con un alza diaria de 1,2 por ciento.
"La inversión extranjera viene fuerte y eso debe mantener al dólar con sesgo bajista", dijo Daniel Velandia, gerente de investigaciones económicas de la correduría Correval.
En Chile, el peso, cerró el viernes en un máximo de tres semanas, en 475,50/476 unidades por dólar, rompiendo largamente el soporte técnico de las 478 unidades, y mantendría su tendencia alcista.
"Creo que después de la ruptura de la semana pasada, el peso seguir al alza, y el mercado va a seguir buscando un nuevo piso, moviéndose en un rango abierto de 473 y 478 unidades", dijo Rodrigo Sarria, operador de Celfín Capital.
(Con reporte de Ursula Scollo en Lima, Walter Bianchi en Buenos Aires, Moisés Avila en Santiago, Nelsón Bocanegra en Bogotá, Silvio Cascione en Sao Paulo y Jean Luis Arce en Ciudad de México)
Jean Luis Arce - Via Reuters