La repotenciación de los institutos armados busca alcanzar los estándares propios del siglo XXI, afirmó hoy el presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Francisco Contreras, quien pidió que sea el viceministerio de Defensa la instancia que efectúe las compras a la brevedad.
“Ahora estamos reparando, modernizando y repotenciando lo que poseemos (…) Tenemos que modernizar los equipos para que alcancen estándares del siglo XXI. Vamos por pasos, reparamos y luego aumentamos capacidades”, declaró al diario El Comercio de Lima.
Según explicó en la entrevista, Perú contó con una Fuerza Armada poderosa y disuasiva en los años 70, pero que debido al fenómeno de la violencia terrorista en la década del 80, se dirigió a combatir a los grupos subversivos del interior.
Como producto de esa dirección de operaciones, indicó que la mayoría de recursos públicos sirvió para la lucha antiterrorista y se dejó de potenciar y mantener a los equipos del Ejército, la Marina de Guerra y la Fuerza Aérea.
Sostuvo que esa situación dificultó el accionar de las Fuerzas Armadas peruanas en 1995, durante el conflicto del Alto Cenepa, cuando se enfrentaron a las fuerzas armadas de Ecuador.
Contreras añadió que la situación empeoró a partir del año 2000, cuando el presupuesto del sector Defensa tuvo una disminución paulatina, al punto de pasar de 14 por ciento del presupuesto total de la República, al 5.8 por ciento.
“Ahora estamos en una situación baja porque todavía no tenemos lo que queremos (…) El otro sigue creciendo y yo me estoy quedando, y vamos a tener una disuasión aceptable. Primero hemos reparado todo lo que tenemos y nos sirve”, mencionó.
En tal sentido, el jefe del Comando Conjunto consideró necesario que el viceministerio de Defensa efectúe las compras de material bélico a la brevedad y de manera exclusiva, sin participación de las Fuerzas Armadas en el proceso.
“Considero que el viceministerio de recursos para la defensa es el que debe realizar estas adquisiciones. Hay que hacer un equipo conjunto multidisciplinario, con gente que conoce de negociaciones y miembros de las FFAA, para que les quiten a los institutos la labor de compra”, dijo.
Agregó que los institutos armados serán, en el caso de las adquisiciones, “el resguardo moral” de una buena compra, y así se evitarán denuncias de presuntos actos de corrupción.
De esa manera, destacó que las Fuerzas Armadas tendrán la suficiente capacidad para enfrentar las principales amenazas para la seguridad nacional, entre las cuales mencionó al terrorismo y al narcotráfico.
Por otro lado, Contreras reconoció que Chile tiene todo el derecho de comprar el equipo bélico que consideran necesario, y que para justificarlo, siempre “ensayan” una respuesta.
“Cuando se les pregunta a los líderes del sur por qué tanto presupuesto para su defensa, ellos ensayan una respuesta: debido a que nuestras exportaciones están en todo el mundo nos conviene que exista paz y nuestras FFAA tienen que estar listas para acudir en favor de la paz en cualquier parte del mundo. Esa es la fachada que dan”, acotó.
Fuente: Agencia Andina de Perú – http://www.andina.com.pe/
“Ahora estamos reparando, modernizando y repotenciando lo que poseemos (…) Tenemos que modernizar los equipos para que alcancen estándares del siglo XXI. Vamos por pasos, reparamos y luego aumentamos capacidades”, declaró al diario El Comercio de Lima.
Según explicó en la entrevista, Perú contó con una Fuerza Armada poderosa y disuasiva en los años 70, pero que debido al fenómeno de la violencia terrorista en la década del 80, se dirigió a combatir a los grupos subversivos del interior.
Como producto de esa dirección de operaciones, indicó que la mayoría de recursos públicos sirvió para la lucha antiterrorista y se dejó de potenciar y mantener a los equipos del Ejército, la Marina de Guerra y la Fuerza Aérea.
Sostuvo que esa situación dificultó el accionar de las Fuerzas Armadas peruanas en 1995, durante el conflicto del Alto Cenepa, cuando se enfrentaron a las fuerzas armadas de Ecuador.
Contreras añadió que la situación empeoró a partir del año 2000, cuando el presupuesto del sector Defensa tuvo una disminución paulatina, al punto de pasar de 14 por ciento del presupuesto total de la República, al 5.8 por ciento.
“Ahora estamos en una situación baja porque todavía no tenemos lo que queremos (…) El otro sigue creciendo y yo me estoy quedando, y vamos a tener una disuasión aceptable. Primero hemos reparado todo lo que tenemos y nos sirve”, mencionó.
En tal sentido, el jefe del Comando Conjunto consideró necesario que el viceministerio de Defensa efectúe las compras de material bélico a la brevedad y de manera exclusiva, sin participación de las Fuerzas Armadas en el proceso.
“Considero que el viceministerio de recursos para la defensa es el que debe realizar estas adquisiciones. Hay que hacer un equipo conjunto multidisciplinario, con gente que conoce de negociaciones y miembros de las FFAA, para que les quiten a los institutos la labor de compra”, dijo.
Agregó que los institutos armados serán, en el caso de las adquisiciones, “el resguardo moral” de una buena compra, y así se evitarán denuncias de presuntos actos de corrupción.
De esa manera, destacó que las Fuerzas Armadas tendrán la suficiente capacidad para enfrentar las principales amenazas para la seguridad nacional, entre las cuales mencionó al terrorismo y al narcotráfico.
Por otro lado, Contreras reconoció que Chile tiene todo el derecho de comprar el equipo bélico que consideran necesario, y que para justificarlo, siempre “ensayan” una respuesta.
“Cuando se les pregunta a los líderes del sur por qué tanto presupuesto para su defensa, ellos ensayan una respuesta: debido a que nuestras exportaciones están en todo el mundo nos conviene que exista paz y nuestras FFAA tienen que estar listas para acudir en favor de la paz en cualquier parte del mundo. Esa es la fachada que dan”, acotó.
Fuente: Agencia Andina de Perú – http://www.andina.com.pe/