Guardia Civil del Perú |
"La conspiración empieza en 1988 con la fusión de los 3 cuerpos
policiales de la época, Guardia Civil, Policía de Investigaciones, Guardia
Republicana, y la creación de la Policía Nacional del Perú.
Las 3 instituciones policiales que existían cumplían su función, cada
una en el campo de su especialidad, como corresponde. A cambio, se creó un
engendro con cuadros de policías de formación general, no especialistas.
¡Porqué se eliminaron instituciones especializadas muy buenas, para
cambiarlas por un ente inoperante con gente que sabe un poco de todo y mucho de
nada?
¿Por qué no se prefirió entrar a un proceso de mejora y modernización de
cada una de las entidades policiales que existían, en búsqueda de mayor
eficiencia y eficacia?
La medida se tomó y la seguridad pública y el orden interno empezaron a
declinar, llegándose luego de casi 3 décadas a una crisis absoluta, con una
criminalidad que creció aceleradamente al detectar un cuerpo policial
minusválido.
Los Gobiernos de calidad demandan cuerpos policiales de alto nivel, bien
preparados y especializados, para que puedan cumplir sus funciones de manera
eficiente y eficaz.
En cambio, los Gobiernos dudosos, de bajo nivel, prefieren instituciones
policiales de baja calidad.
Robos, asaltos, secuestros, asesinatos y otros actos delictivos en alto
número, profusamente difundidos por los medios de comunicación todos los días,
distraen a la gente y desvían su atención de los problemas serios del país.
Igualmente, una institución policial incapaz de cumplir a cabalidad con
su rol otorga mayor certeza a los funcionarios públicos corruptos, de que no
tendrán al frente policías en capacidad de investigarlos de manera muy
profesional.
Algo más, algunos policías que pensaban llegar a grados menores ahora
son generales, gracias al Gobierno. Ellos, se postrarán en culto incondicional
a los pies de quién los elevó a un alto grado, sin merecerlo.
Llama la atención que desde 1988, habiendo pasado por el Gobierno varios
presidentes, éstos no hayan corregido el espectacular y muy visible error de
eliminación de la Guardia Civil, Policía de Investigaciones y Guardia
Republicana.
Podríamos especular que, en los más íntimo de su ser, los sucesivos
presidentes, meditaron en su oportunidad y se inclinaron por participar de
manera tácita en la conspiración contra la seguridad pública y el orden
interno, para gozar también de sus beneficios. Fácil, bastó cerrar la boca y no
realizar ninguna acción, salvo la de comprar más y más coches patrulleros,
motos y otros equipos, medidas que no resuelven el problema.
Nos preocupa, cuando vemos que los actuales candidatos a la presidencia
del país, parece que se acercan a formar parte de esta grave conspiración. No
hemos visto o escuchado alguna propuesta pre electoral con respecto a la
rectificación del grave error de 1988.
De no acabarse con esta gran conspiración contra el país, terminaremos
con una sociedad en un caos total, en la que para sobrevivir habrá que
defenderse cada uno con su propia arma, como en tiempos antiguos del lejano
oeste americano."
Texto: Capítulo XXX "La Conspiración Contra la Seguridad Pública y el Orden Interno" del libro Reflexiones Sobre Perú.
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