En Lima han proliferado las
antenas de teléfonos móviles o celulares. Ellas aparecen por todas partes,
sobre casas, edificios, hospitales, colegios, etc.
Existe una muy alta probabilidad
que las emisiones de radiaciones de esta instalaciones sean causantes del
aumento de los casos de cáncer, y de la aparición de tumores malignos raros en
partes del cuerpo en las que antes nunca se reportaron casos.
Perú no tiene ninguna norma que
establezca distancias mínimas de estas antenas con respecto a casas, edificios
de departamentos, colegios, hospitales, oficinas y cualquier otro lugar donde
el ser humano viva o pase la mayor parte del día.
En otros países ya se han
realizado estudios, aplicándose las normas correspondientes. Tal es el caso de
la ciudad de Belo Horizonte en Brasil, cuyo caso hemos tomado de una publicación
del diario Expreso al respecto:
“Belo Horizonte con 2.5 millones
de habitantes, es la tercera ciudad de Brasil, tiene el mejor sistema de salud
a nivel nacional, la mejor educación del país, con un nivel de vida bastante
superior al promedio del país. Según la
ONU , es la metrópoli con la mejor calidad de vida de Latinoamérica.
Sin embargo, tiene la más alta incidencia de cáncer a nivel nacional, un
fenómeno difícil de explicar. Belo Horizonte cuenta con la más alta
concentración de estaciones base de celular en el país. La pregunta natural fue
saber si existe alguna correspondencia. Al evaluar las estadísticas de
mortalidad por neoplasia, medida en función a la distancia de una torre de
microondas de celular a la residencia del fallecido, se obtuvo los siguientes
resultados:
A 100 metros de una
estación de celular 3,569 muertes
A 200 metros 1,408 muertes
A 300 metros 973 muertes
A 400 metros 482 muertes
A 500 metros 292 muertes
Más allá de los 1,000 metros 147
muertes
Del total de personas fallecidas
con cáncer, el 81.37% se produjo dentro de los 500 metros de distancia
a la antena, lo que indica una correlación altamente significativa.”
Estamos frente a un caso de
EMERGENCIA SANITARIA que el Gobierno Peruano debe afrontar y resolver de inmediato.