"El Ministerio
de Cultura de Perú y el Bajo Nivel de la Civilización o Cultura Peruana Actual
Habiendo estado en la posición más alta a nivel de civilización en la
época de virreinato del Perú, en la actualidad la cultura peruana se encuentra
en los niveles más bajos de Latinoamérica y probablemente en la última
posición.
De las altas civilizaciones de las eras Pre-inca, Imperio Inca y Virreinato,
entramos en decadencia con la independencia, cuando San Martín y luego Bolívar
dejan al Perú destruido y en completo caos.
Y es que el comportamiento de la gente en la ciudad, es de lo más incivilizado
en todo aspecto y sin distinción de clase social, raza o posición económica.
Así como para
lograr mejoras en la producción agrícola, se requiere mejores prácticas con los
cultivos o culturales, con las personas y con la sociedad se necesita lo mismo.
Es evidente, que
los ciudadanos peruanos no reciben ninguna enseñanza ni práctica cultural
constante, que lleve a tener un mejor comportamiento contribuyendo así a
configurar lo que se llama una sociedad culta.
Me parece que, para
subsanar esta deficiencia, el Gobierno peruano crea en julio del 2010, un
Ministerio de Cultura a cargo de un ministro con voz y voto en el Consejo de
Ministros. Antes solo existía un Instituto Nacional de Cultura dependiente de
otro ministerio.
No creemos que el
Ministerio de Cultura haya sido creado sólo para administrar museos,
bibliotecas, teatros, o para promover la música, danzas, folclore, entre otros
aspectos del arte peruano, porque para ello no se necesita que integre un
consejo de ministros.
Alta cultura, aplicada
a las civilizaciones, es sinónimo de gente educada, respetuosa de la ley,
considerada con los demás; significa modo de vida bien planeado, ordenado,
seguro; y humanizado.
La ciudad de Lima
en particular es una muestra viva de cómo se comporta un pueblo incivilizado.
Esta triste situación, la sentimos los peruanos en nuestro día a día en
las ciudades, caminando, en coche, atendiéndonos en los servicios públicos,
etc. y la verdad que ya estamos bastante saturados de este modo de vida, del
discurrir de nuestra vida de una manera tan distinta a otros pueblos del mundo
de alta cultura.
Es fácil para el Ministerio de Cultura dedicarse a actividades en torno al
arte, la arqueología y otras prácticas, dejando de lado la medular razón de ser
de su existencia, configurar una civilización o sociedad culta.
Elevar el nivel cultural de los peruanos, lograr ciudadanos cultos y ciudades
del primer mundo, es el trabajo del ministro de cultura, agregando también
obviamente como complemento sus actuales actividades.
El ministro actual, es el más feliz del gabinete de ministros porque en su
trabajo no tiene mayores problemas, y para mantenerse en dicha condición hace
de la vista gorda con la grave problemática de nuestra desgraciada y atrasada
civilización.
El ministro de
cultura debe ser proactivo, es decir asumir el pleno control, tomar iniciativa,
desarrollar acciones creativas y audaces para generar mejoras, y asumir la
responsabilidad de hacer que las cosas sucedan; debe decidir por sí mismo lo
que haya que hacer y hacerlo, coordinando para ello con sus pares del consejo
de ministros.
Los peruanos no
queremos seguir estando entre los pueblos menos cultos de Sudamérica, de
Latinoamérica, o entre los primitivos comparando con Europa.
El Ministerio de Cultura,
aparenta ser el de menor importancia con respecto a los otros ministerios, pero
resulta que es todo lo contrario, es el más importante y el de mayor
complejidad, si asume su verdadero y más importante rol que es el de elevar el
nivel de la civilización peruana actual."