domingo, 1 de marzo de 2015

La Policía Frankenstein del Perú PFP

No es un problema de los policías, lo es del Estado, de los Gobiernos que destruyeron buenas instituciones policiales para generar un monstruo, un conglomerado desarticulado de órganos provenientes de cuerpos distintos, al que llamaron la Policía Nacional del Perú PNP, ente que no piensa ni camina bien.

Hechos delictivos en incremento por todo el país que ponen en zozobra a todos los peruanos y también a los extranjeros que reaccionan con justa razón a través de sus representantes diplomáticos quienes recomiendan a sus connacionales no concurrir a determinados sitios.

No sabemos porque, pero la reacción de los Gobiernos ha sido solo realizar compras de patrulleros, motos, etc y de aumentar el número de policías mal preparados.

Todos los ministros del interior han fracasado y la delincuencia empieza a reinar.

Recomendamos leer un interesante artículo que hemos tomado de reflexionesdeperu sobre el tema, el que incluye importantes recomendaciones.



¿Policía Nacional del Perú o Policía Frankenstein del Perú? (2012)

Mary Shelley escribió a los 18 años la novela Frankenstein (1818), según la cual el científico Victor Frankenstein crea un ser humano integrando cerebro, órganos y extremidades de diferentes personas. Al terminar su obra se da cuenta que ha dado vida a un monstruo que actúa de manera desequilibrada, sin control, sin razonamiento, y que comete crímenes por donde va. Fuera de control el monstruo acaba con la vida de su creador.

Hace unos años por venganza política de un gobierno, y por celos de una institución armada que se veía superada, se decide el fin de la más prestigiada institución policial del país, la Guardia Civil. Para ello se decide la fusión de lo bueno, lo malo y lo feo de la policía de esa época, es decir de la Guardia Civil, la Policía de Investigaciones, y la Guardia Republicana.

Con esta medida, se destruye una buena institución, pero también se termina con el trabajo policial por especialidades, y se crea un monstruo, una criatura, ensamblada con las piezas de lo que había, aparece en escena la Policía Nacional del Perú PNP, o mejor dicho, la primera Policía Frankenstein del Perú.

El personal especializado en investigaciones puede dirigir el tránsito, el especialista en control de cárceles puede hacer investigación criminal, y el especialista en seguridad ciudadana puede servir como carcelero. La cosa se agrava cuando oficiales no preparados para ello asumen la conducción de la PNP en todos sus niveles. 

Con el paso del tiempo las consecuencias se van tornando graves, la delincuencia y el descontrol del país aumenta, la mala conducción y la mayor incidencia de fracasos que éxitos en el accionar policial aumenta.

¿Y que hacen frente a este desbarajuste? Por supuesto que no dan marcha atrás. Empiezan a poner en el escenario a una serie de instituciones, grupos, empresas, asociaciones que pretenden compensar el hundimiento de la institución policial.

El monstruo policial inicial, la PNP, sigue creciendo y surgen:
a-Las empresas de guachimanes
b-Las rondas campesinas
c-Las rondas urbanas
d-El serenazgo en cada municipio
e-El Instituto Nacional Penitenciario - INPE
f-Los PNP trabajando de Guachimanes
g-y menos mal que quedó sin efecto el Servicio Policial Voluntario.

Todas estas instituciones son en realidad la policía del Perú, la segunda Policía Frankenstein del Perú, la versión moderna de Frankenstein, la criatura en esta oportunidad no es un ser humano sino un conglomerado policial dotado de un cerebro desquiciado que no sabe a donde quiere ir, y por un cuerpo con tronco y extremidades desarticuladas que funcionan cada una por su cuenta y mal.

La PFP peruana es una realidad, espero que aun no estemos en la fase que, como en la novela, el monstruo termina destruyendo a su creador y sostenedor.

Escribimos esto con todo respeto por los integrantes de la PNP porque no depende de ellos tomar las medidas necesarias para que esta situación cambie.

La reivindicación de la Guardia Civil del Perú se impone con urgencia (esperemos que la venganza política y los celos institucionales se hayan apaciguado o desaparecido). igualmente es necesaria la restitución del trabajo policial por especialidades con el retorno de la Policía de Investigaciones, y de la Guardia Republicana, mejoradas. Asimismo, la desaparición de las instituciones y entidades que hemos enumerado (a/g) las que contribuyen con el caos policial actual y el ahondamiento de la crisis en materia de seguridad. (hurtvillac)